Elisa Guimarães, fundadora del movimiento Empoderadas Positivas, Profesional y Auto Coaching, Consultora en Análisis del Comportamiento, egresada del Instituto Brasileño de Coaching (IBC) y certificada como Positive Practitioner & Trainer por el Instituto Felicidade Agora é Ciência, entre otras formaciones del desarrollo humano; invita a todas las mujeres a potenciar y fortalecer su poder interior.
El empoderamiento femenino hasta ahora no es algo natural, especialmente en una sociedad sexista y patriarcal donde no se nos anima a estar unidas y cuestionar los roles sociales que nos fueron impuestos por nuestro género. Ya sea por miedo al posicionamiento debido a juicios, incluidas otras mujeres, o por falta de conocimiento sobre el tema, muchas de nosotras somos rehenes de una vida infeliz para cumplir con las expectativas de la sociedad y así encajar dentro de un estándar.
Empoderar a la mujer consiste en potenciar y fortalecer su poder interior para que puedan tomar decisiones libres, sin el sentimiento de culpa e inadecuación por decidir seguir caminos distintos a los que el inconsciente colectivo espera de una mujer.
Una mujer empoderada es una mujer audaz, dispuesta a dejar su comodidad y riesgo para cuestionar, recuperar el poder femenino en la sociedad y no permitir que el machismo se interponga en sus decisiones y opciones de vida. Esa mujer es una líder de sí misma y se elige en primer lugar todos los días, tiene tiempo para el autocuidado, se ama, se valora, se respecta, se estima, confía en su poder y fuerza interior y por eso no alimenta el victimismo de la culpa. No necesita permiso para ser quien es, ni pierde tiempo deseando validación de los demás, pues ella tiene convicción de su valor.
Ser líder de sí misma es, ante todo, una actitud de protagonismo en su propia vida, de sentirse cómoda y valiosa siendo quien es, de sentirse merecedora y digna de personas, cosas y situaciones buenas, felices, de amor y positividad. Esa mujer no ve a otras mujeres como rivales, sino como iguales y dignas de respeto y amor. Entiende que cuando las mujeres nos unimos y dejamos de competir podemos crear una red donde todas estaremos viviendo en hermandad y triunfando juntas. Por eso tiene como propósito empoderar a otras mujeres.
Tiene consciencia que la falta de hermandad nos debilita y nos pone en una posición social de vulnerabilidad que favorece sólo el machismo y el patriarcado. Ésta actitud y posicionamiento de empoderamiento en la vida no es para quienes están en cumplimiento, sino para quienes quieren crecer, evolucionar, transformarse y así impactar positivamente su entorno, otras mujeres, la sociedad, el mundo, la humanidad.
Seis actitudes de una mujer empoderada:
1. Se conoce a si misma, conoce sus propios límites y tiene criterios bien definidos para sus relaciones.
2. No quiere ser aceptada por todos y toma sus decisiones en base a sus valores y principios de conducta.
3. Está segura de sus decisiones y no se preocupa con los errores, culpa y sufrimiento. Pone atención en la solución y sigue hacia adelante sin mirar atrás.
4. Es suficiente, le encanta estar en su propia compañía, está enamorada de sí misma y sólo dedica tiempo y energía a quienes lo merecen.
5. No hay competencia ni rivalidad, es segura de sí misma y confiada. Por eso apoya, celebra y elogia a otras mujeres.
6. Aprendió a decir no a situaciones que no le gustan, que no acepta y actitudes que no tolera.
Permítete activar tu poder interior, el mundo necesita de mujeres líderes de sí mismas, mujeres increíbles como tú. Mujeres empoderadas empoderan a otras mujeres.
¡Vamos juntas, empoderadas positivas!
